“Nosotros repartimos nuestro café en bicicleta por Auckland y por correo hacia el gran Nueva Zelanda“: acaso inspirados por los viejos repartidores de leche, los dueños de la marca Eighthirty Coffee Roasters decidieron volver a la vieja botella de vidrio. La marca compra cafés arábica lavados, siempre a través del comercio justo, y tiene cuatro blends (orgánico Fair Trade, Brazil Ipanema Gourmet, Ethiopean Yirgacheffe y Swiss Water Decaf) y una línea de cafés fríos para beber al abrir la botella nomás. Para tomar bien congelados, se les agrega un toque de vainilla, leche orgánica y agave mexicano. Un aliento cafetero fresco en la puerta de casa, cada mañana.
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