La madera es uno de cientos de aromas que puede encerrar una taza de café. Y la marca The Woods Coffee se propone rendirle tributo. Casi en la frontera de los Estados Unidos con Canadá, una pequeña empresa familiar empezó a tostar granos y envasarlos para su venta. Para la imagen de la marca, los diseñadores del estudio Man Man Van se inspiraron en el ambiente natural: imaginen una geografía como la de Twin Peaks, que justamente transcurría en esa zona. Con la vibra masculina de los leñadores norteños, los paquetes, las botellas y los vasos replican el ícono de las montañas con pinos. Pero mi preferida es la taza metálica, un fetiche para todos los que alguna vez fuimos de campamento y una declaración de amor al café (y al aire libre).
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El café de los leñadores
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