Aunque parece un invento de toda la vida, el coffee break recién se creó en 1952. Y en estos tiempos de hiperproductividad, la pausa en el trabajo se devela como imperativa para rendir más. La aplicación Coffee Break (a 2,99 dólares para compus Mac) permite programar las pausas de descanso para no eternizarse en el cuelgue productivo. Desde el escritorio, invita a setear los intervalos de descanso y asignar horarios con alarmas que inviten a un café y recargar energías… para volver al trabajo.
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La pausa son 5 minutos

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