El café es mejor que el sexo: la tajante definición surgió de una encuesta realizada entre los huéspedes de Le Méridien, una cadena hotelera, que resumió la pasión de los bebedores por la infusión. El diario sensacionalista inglés Daily Mirror recogió el guante y publicó el dato: más de la mitad de los encuestados, entre viajeros frecuentes de seis países, preferiría dejar a sus parejas antes que el café. Para el 50 por ciento de la gente, el café es más imprescindible que el sexo para empezar bien el día. Y el 78 por ciento podría abandonar el alcohol, las redes sociales o las relaciones sexuales… pero no la infusión. Eso es amor verdadero.
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