Una solución definitiva para el problemón de quemarse la boca al tomar tanto café: la revolucionaria taza SmartLid (“tapa inteligente”) cambia de color… según la temperatura de la bebida. ¡Llame ya! Con una tapa de plástico que oscila del marrón oscuro al rojo brillante, indica cuándo el cafecito está listo para tomar. A la venta por módicos 9 dólares en Internet, sus promotores dicen que, para un bebedor compulsivo, representa apenas el 1 por ciento de lo que gasta en café. Es negocio.
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