Inspirada en la estética steampunk, es una de las cafeteras más impresionantes del mundo: se llama AKMA (que en coreano significa “diablo”) y prepara un café demoníaco con el método del goteo frío. La máquina, creada por la empresa Dutch Lab, consta de tres frascos alineados verticalmente a través de los que circula una corriente de agua no necesariamente caliente, por lo cual no hay gasto eléctrico. El recipiente principal es una válvula regulable para que el usuario pueda calibrar la disolución de la taza. El siguiente paso tiene lugar en el tanque de café, por donde se desliza el líquido y después atraviesa una serie de filtros para que quede perfecto. Los materiales son de lujo: un esqueleto ligero de aluminio anodizado muy resistente y delicados vidrios de borosilicato que aguantan elevadas temperaturas y son fáciles de limpiar, al igual que las válvulas hechas de agujas de letón. La máquina AKMA sale 5.200 dólares pero dicen que lo que vale… cuesta.
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La cafetera steampunk
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