Los misterios del paquete, al descubierto: si todos los envases de café son opacos, éste es transparente. La marca danesa Coffee Collective decidió terminar con uno de los mitos del envasado cafetero, fundado en un hecho científico: el café se conserva mejor en un lugar oscuro, seco y a temperatura ambiente. Cuando salió al mercado, allá por el año 2011, provocó un pequeño cisma en el micromundo cafetero europeo porque se dijo que la luz podría perjudicar el contenido del envase. “Siempre pensamos que era una lástima que el consumidor no pudiera ver el interior cada vez que compraba una bolsa de café”, dijeron sus creadores al sitio Sprudge. Así encontraron el truco: como es cierto que la luz perjudica al café, la parte transparente de la bolsa es la inferior. Sobre la góndola, los granos quedan a resguardo de los rayos fatídicos.
