En un futuro cercano, en una ciudad como la suya, una línea dividirá la sociedad en dos: Los Que Tienen viven sobre la línea y Los Que No, debajo. Es literal, no simbólico: una barrera llamada La Línea divide los barrios altos de los barrios bajos (si es porteño, imagine que a lo largo de la avenida Rivadavia hay puestos de control y que para ir de Recoleta a Lugano le piden documentos y lo cachean como en un aeropuerto). Así es el mañana que imagina Weird City, la serie corrosiva recién estrenada en YouTube: una ciudad rara repleta de pantallas con videos de árboles, mascotas virtuales que se desenchufan, máquinas de desahogo para la angustia y expendedoras de jugos de electrolitos (de un lado) y casillas de chapa, neumáticos quemados y perros famélicos (del otro). Aun con trazo grueso, esta línea actualiza para la ciencia ficción el dilema que antes ocupó a grandes fabulistas como Dickens, O’ Henry o Hemingway: tener y no tener.
Las diferencias de clase, en una serie distópica: en Weird City, Jordan Peele ofrece su mirada oscurísima del mundo.
Como una mezcla entre Black Mirror y Downton Abbey, la serie muestra con humor ácido el sistema rígido de castas que mantiene a cada uno en su lugar. En la parte alta de Weird City, la reputación social se mide en cantidad de likes recibidos y la vida cotidiana está marcada por una PNT omnipresente: la publicidad no tradicional se cuela en todos lados y ya resulta imposible distinguir un consejo desinteresado de un chivo. Su creador es Jordan Peele, el director de la película ¡Huye!, otra alegoría distópica donde los blancos se alimentaban del jugo vital de los negros. Entre los seis episodios con un elenco superestelar, dos solitarios encuentran el amor improbable gracias a una aplicación de citas que comete un error (aunque se piense que los algoritmos nunca se equivocan) y un paria social busca en un gimnasio el cuerpo y la familia que no tiene. Pausa. En YouTube solo se ofrecen estos dos episodios gratuitos y para ver el resto deberá pagar unos centavos de dólar y así cruzar al grupo de Los Que Tienen: nunca antes la narrativa y el formato estuvieron tan emparentados.
¿Lo peor está por venir? En esta antología, Peele ofrece su mirada oscurísima del mundo (y ahora está preparando la remake de La dimensión desconocida, otra serie unitaria que se desconsolaba ante el futuro). En una época entregada al hiperconsumo, Weird City enumera la cantidad de aparatos, redes sociales y aplicaciones que deberá tener el día de mañana para estar del lado de arriba. Y da un vistazo a lo que pasaría si una avenida cualquiera se convirtiera en una barrera que parte su ciudad al medio: la línea de pobreza ya no sería solo una expresión de la estadística.
