Postales desde la fría Detroit: Ford presentó un súper deportivo liviano y otras maravillas sobre ruedas.
Mucho frío y mucho café (para soportar tanto frío): dos de las cosas que más recuerdo en mi visita al Salón del Automóvil de Detroit. Y los autos, claro. Es como viajar al futuro, donde los vehículos todavía no vuelan pero ya ponen primera hacia el mañana: ¡llegan más lejos! Este año, el NAIAS (la sigla que resume North America International Auto Show), tuvo un protagonista excluyente: el nuevo Ford GT con motor Ecoboost de 600 cv y fibra de carbono. Una locura: el superdeportivo fue develado en el Salón y es un modelo de nuevas tecnologías aerodinámicas y de alto desempeño porque usa materiales ligeros, incluyendo fibra de carbono y aluminio. El GT empezará a producirse a fines del año que viene, para conmemorar el 50° aniversario de la histórica victoria del modelo original en las 24 horas de Le Mans.
Pero no fue lo único. También se presentó el Mustang Shelby GT350R, un deportivo de 500 cv que tiene el motor más potente jamás producido por Ford y ruedas de… fibra de carbono. Se lució la nueva F-150 Raptor, una pick-up off road de altísimo rendimiento. Y la clásica F-150 fue elegida por un jurado de cincuenta periodistas especializados de los Estados Unidos y Canadá como “la mejor pick-up del año”. A un charco de agua de la frontera con Canadá, el Salón del Automóvil de Detroit es un espectáculo en toda su extensión que ofrece un vistazo del estilo de vida que tendremos en unos años: cada vez más livianos y cuidadosos del medio ambiente, los autos parecen naves espaciales que todavía circulan sobre ruedas. Sólo les falta la cafetera.
