“Siempre dependí de la amabilidad de un extraño”

Un café por una sonrisa: ésa es la promesa de una original campaña de marketing. La agencia de publicidad de Nescafé, la marca de café instantáneo más vendida del mundo, tuvo la idea de instalar máquinas expendedores en dos esquinas de Berlín. Las cafeteras tienen una cámara y una pantalla y ofrecen un café gratis a quien llegue al sitio. Pero la novedad es que el café que sale en una esquina es el que pertenece a la de enfrente: así, invita a regalar una sonrisa, un café y un saludo a un desconocido, de manera de empezar el día más animado. La ideota fue de la agencia OgilvyOne y, como corresponde a esta era hiperconectada, las reacciones de la gente se convirtieron en videítos viralizados a través de las redes sociales.