Y ahora, ¿qué hacemos con las cápsulas?

El boom cafetero de la modernidad está creando nuevos problemas: ¿qué hacer con tantas cápsulas usadas de plástico y aluminio? La empresa Nespresso ya lanzó un sistema de reciclado pero en Europa (sí, nos queda un poco lejos). En el Viejo Continente, donde se venden cápsulas de a toneladas, el tema es motivo de preocupación para los municipios. Y un pionero fue el gobierno de Vitoria, en España, que convertirá las cápsulas desechadas en piezas de compostaje para fabricar macetas o papeleros. El ayuntamiento  firmó un acuerdo con dos empresas productoras y distribuidoras de café para recoger y reciclar las monodosis de aluminio y de plástico. El convenio con las empresas permitirá que las cápsulas usadas puedan tener un tratamiento específico y que una distribuidora se encargue de recoger las envolturas de aluminio. Una vez al mes, estas empresas, que donan cuatro contenedores, recogerán el contenido de los dos depósitos y los llevarán a Barcelona para reciclarlos.