G

Ginebra: un chocolate a cada paso

chocolate
La ansiedad de una noche solitaria en patria ajena (imaginen el desarraigo de estar a 10.000 kilómetros de casa…) me obliga a asaltar el minibar de la habitación del hotel en plena madrugada: un Toblerone alcanza para mitigar la angustia oral aunque el precio (7,50 francos suizos, casi 35 de los nuestros) podría quitarme el sueño por un rato.
sommelier-en-suiza-web3Los devaluados pesos argentinos no alcanzan para abrir una cuenta que haga gala del legendario secreto bancario ni para comprar un reloj de los que muestran en las vidrieras (Tag Heuer, Tessot o Briesling arrancan en 2.000 franquitos: mejor ni calcular). Entonces, el viajero sudamericano se empacha con otro de los productos autóctonos de la Confederación: a cada paso, una chocolatería. Si Nestlé, Milka, Lindt o Toblerone son emblemas nacionales, en las callecitas de Ginebra uno se topa con el cacao que, como el café, llegó del Nuevo Mundo y acá encontró una nueva vida. ¡Empacho!
toblerone-logo

¡No se hagan los osos! ¿Qué esconde el logo?

Como esas pistas secretas masónicas o los antiguos mensajes cifrados de los illuminati, hay quienes adivinan códigos no dichos en el logo de Toblerone. Entre las montañas, un oso hace la pirueta que se le exige a toda mascota: levanta la patita. ¿Un mensaje en clave?

CategoriesSin categoría
Nicolás Artusi

Es periodista y sommelier de café. Trabaja en radio, prensa gráfica, televisión y online. Escribe libros largos y artículos cortos. Fue declarado Personalidad Destacada de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires.